¿Y qué sigue?
La delegada de la Sedesol, doña Socorro de Araujo, le ha dado por alertar a la población de la existencia de mañosos que se la pasan jodiendo a la gente, sacándoles dinero por todo y haciéndose pasar como enviados de la propia delegación federal. La pregunta es ¿y qué sigue o se va a quedar alertando a la gente nomás? Bien valdría la pena investigar si no es que en realidad son empleados de Sedesol que se están pasando de lanzas o efectivamente son bandidos a los que hay que apañar y meter a la cárcel.
Es de todos sabidos cómo se las gastan los vivales que van de pueblo en pueblo peinando a la pobre gente. También todo mundo sabe cómo las autoridades federales se hacen de la vista gorda, como el coordinador de Oportunidades, Sergio Edgar Cortazar, que a su corta estatura no ha sabido qué hacer para acabar con el contubernio de los que entregan el dinero del programa y los tianguistas que van de pueblo en pueblo vendiendo de todo hasta dejar sin un centavo a los beneficiados, y nadie ni de chiste hace nada.
No puede la delegada de Sedesol quedarse con la denuncia o conformarse con la cantaleta de ahí viene el lobo; debe actuar y poner el ejemplo de lo que le pasará a los que sigan cometiendo actos de abuso y robo a la gente. Ya es para que hubiera armado con su personal un operativo para agarrar a los bandidos y entregarlos a las autoridades judiciales, o de perdis ya hubiera metido una demanda penal, pues a final de cuentas no sólo se trata de tomarle el pelo a la gente, sino de usurpación de funciones y otros delitos.
No es posible que a estos delincuentes que le quitan lo poco que tiene la gente sigan haciendo de las suyas y todos tan contentos. Pasa como en el caso de los sanchos que ya les dicen los diablos, porque todo mundo dice que existen pero nadie los mira. Pues el tema de los vivales no debería ser así porque roban a plena luz del día, convocan a juntas, recogen firmas, documentos, copias de credenciales de elector y, sobre todo, se llevan el dinero de la gente con la promesa de volver con algún apoyo, pero nanais.
--Pa' su mecha, dicen que al que no lo calienta ni el sol y anda llora y llora es el alcalde de Soyaló, porque no ganó su gallo y le metió hasta lo que no tiene.
Se quedó en la calle.
Bueno, no él sino la presidencia municipal.
Y lo peor es que su cuenta pública está echa un desmadre y adiós la esperanza de que llegara su protegido y le tapara sus porquerías.
Por eso es que el alcalde, más conocido en el bajo mundo como el matraca, no para de llorar su desgracia.
¿Cómo le habrá caído la derrota que cuando a pleno día de la votación le dijeron que iba perdiendo, de un somatón cayó privado al suelo?
Hubiera usted visto a todo el cabildo corriendo con alcohol en mano para volverlo en sí.
Su mayor preocupación es que ahora al saber cómo le hará para poner en orden su desmadre administrativo y financiero en la alcaldía.
Dicen que las cuentas no cuadran y hasta ya está pensando vender el ranchito que se compró en Jitotol, para reponer lo perdido.
Bien dice el dicho que lo del agua al agua.
En contraparte, las que andan de insoportables son las hermanas González Urbina, Mélida y Consuelo.
Andan en un plan de mírame y no me toques, con un aire de perdonavidas y de cobrar venganzas a quienes no apoyaron a su candidato que ganó.
Según ellas ganó su candidato porque hicieron todo, pero la mera verdad es que ganó porque sus suegros, los mecos, le metieron un chingo de paga.
La cosa es que doña Mélida y doña Consuelo se sienten las muy influyentes porque sus hijos van en la planilla del que ganó.
Miran a la gente con desprecio y hasta dicen que han prometido meter a la cárcel a los que no apoyaron a su candidato.
¿Puede usted creer semejante belleza?
¿Cree usted que esas cosas pasen en Soyaló?
No sólo eso, sino que una prima de las hermanitas veneno, Olga Urbina Velasco, que va de síndico, ya mandó a decir que no va a recibir Amanecer.
Que mejor se lo den a los viejitos necesitados, muertos de hambre, porque ella va a tener un sueldazo.
Y uno pensando que otros municipios eran la reedición de la telenovela Zacatillo, pero por lo visto en todos lados se cuecen habas.
--Lo prometido es deuda y aquí otra parte del melodrama del líder del sindicato del CONALEP, Roger Cáceres Rodas.
Este fulano pasándose por el arco del triunfo el contrato colectivo y el reglamento de la institución, quiere meter a puro recomendado.
Quién sabe de dónde sacó que la apertura del nuevo plantel del CONALEP es para que cumpla con sus compromisos personales.
Y no crea que son compromisos con la educación o el mejoramiento de la plantilla docente de la escuela, sino compromisos oscuros.
Diga usted si no trae acuerdos siniestros que mandó su lista con los nombres del 90 por ciento de los docentes a contratar.
Y junto a la lista de sus recomendados mandó el mensaje de que o le hacen sus caprichos o se irá a una huelga.
Pero de una vez que quede asentado que su huelga no atenderá a intereses académicos, sino a caprichos y ambiciones personales.
Haber qué dice la gente, si vota porque se contrate a los recomendados de Roger Cáceres Rodas o los que pasen el examen de CENEVAL.
Hay que preguntarle a la gente si prefiere que su hijo le enseñe un maestro que acredite un examen de oposición o cualquier hijo de vecino.
La neta que no se pase de vivo, porque ofende la inteligencia del respetable público, daña la imagen del CONALEP y del sindicato, claro.
Los sindicalizados deberían empezar por hacerle un juicio para destituirlo, porque seguramente no los está haciendo partícipe de sus negocios.
¿O quieren tenerlo para que se siga sirviendo con la cuchara grande con el discurso de los derechos laborales?
--Los locatarios del nuevo mercado Juan Sabines sí que tuvieron motivos ayer para celebrar.
El gobierno de Juan Sabines y de Jaime Valls les cumplió con la construcción de esta gran obra que es su vida misma.
Para los locatarios un local propio en un mercado, el que sea, es patrimonio para toda la vida.
Ahora, tener un local en un mercado nuevo, funcional, de poca, pues es para agradecer infinitamente.
Pero los ganones, hay que decirlo, no son sólo los locatarios, sino todos los que acuden al mercado a comprar sus alimentos.
Se embellece la ciudad y la referencia de la comida tradicional de la ciudad será digna, para presumirla con los visitantes.
No es lo mismo que los turistas vayan a un mercado sucio, apestoso, que a un mercado nuevo, limpio, ordenado.
La herencia de Juan Sabines no es pues sólo para los locatarios, sino para toda la ciudad, aunque algunos no vayan nunca al mercado.
Sin embargo, podrán decir que viven en una ciudad cuyos mercados del centro son de los más limpios, modernos y confiables del país.
--Se pone sobre aviso a los alcaldes y diputados electos que por ahí les va a caer uno que otro oportunista que querrá apropiarse de sus triunfos.
No sólo de los que quieren vender de todo a los ayuntamientos o hacer toda la obra pública, sino de los que quieren tener el control político.
Se sabe de casos en los que hay quienes han prometido a los alcaldes electos que les bajarán el dineral del mundo para sus municipios.
¿Y cuál es la tirada?
La tirada, mi querido Watson, es que estos personajes quieren sentirse útiles o reponerse de las derrotas sufridas el 4 de julio.
Como ya se convencieron que sus candidatos resultaron una papa y la revolcada estuvo de la tiznada, andan queriendo quedar bien.
Nomás que los alcaldes electos ni se están tragando los mocos ni están a la espera de que aparezca el padrino prometido.
Tienen muy claro, salvo uno que otro menso que cree otra cosa, quién los apoyó y por quiénes ganaron la elección.
Hay quienes, por ejemplo, no podrían ni haber sido candidatos, cuantimás haber ganado la contienda.
Pero como de todo hay en la viña del señor, es probable que estos confundidos caigan en las redes de los oportunistas.
Hay hasta políticos que son unos apestados en este sexenio y andan prometiendo apoyos como si fueran el gobernador.
Todo con tal de ganarse la confianza del incauto y echarse a la bolsa un municipio para cuando llegue la hora de chantajear, perdón, de negociar.
Ante la proximidad del 2012 cual más se le antoja meterse a la sucesión y piensa que tener unos alcaldes o diputados les dará poder.
Ahí andan como locos reuniéndose y jugándoles cabezas a los que ganaron la elección el 4 de julio.
La pregunta que de entrada deberían hacer los electos es ¿por qué si dicen que reconocen su liderazgo y compromiso no los apoyaron en campaña?
¿Por qué esperaron a que ganaran para que se les acercaran?
¿Son muy cautos o piensan que de plano los electos son muy pendecos, como dice Lupe?
--AVISO INOPORTUNO.
Se compensará con una visa de residente en Arizona a quien hurgue y confirme si es cierto que el mentado chunco estuvo detrás de la Ley SB1070. ¿Usted qué cree? Capaz que metió su cuchara.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario