junio 20, 2011

Confines 21/Junio/2011

Conciliación de intereses

Para quienes creen en los Santos Reyes y miran todo planchadito para las elecciones del 2012 deben ir poniéndose a pensar que no será así, porque habrá choque de intereses políticos que serán muy difíciles de conciliar, empezando porque se pongan de acuerdo allá arriba entre los que quieren una cosa y demandan lealtades anticipadas, entre los que buscan arropamiento y pretenden definiciones, entre los que nomás andan a la caza de algún bien y les vale madres mentir, llevar al baile a incautos.
El PRI, el PAN, el PRD, el Convergencia, el Verde, el PANAL, el PT y hasta el Orgullo Chiapas querrán su parte de poder y en esa lucha está muy cabrón que haya acuerdo, sobre todo porque en todos los partidos cohabitan gente decente y gente indeseable, chiapanecos que quieren lo mejor para el estado y chiapanecos sin gramo de conciencia social o colectiva, leales y desleales, personas y personeros, tranquilos y violentos, constructores de pactos y destructores de agendas comunes, en fin, un catálogo.
Está claro que el interés común y el más sagrado debe ser el del estado y el de todos los chiapanecos, pero eso es un sueño. No hay hegemonías ni manera de hacer entender a los necios que es el tiempo de mirar al futuro de Chiapas y pensar en lo que conviene no a alguien en particular, no a un grupo en particular, sino a todos, al pueblo, a los pobres y a los ricos, a los olvidados y a los siempre presentes, a los que viven en la montaña y los de la ciudad, a los que no hablan ni español y los que mastican otras lenguas.
Hay que oír la voz que llama a luchar por dignificar nuestra propia vida, nuestra propia casa, nuestros propios pueblos. Hay que desatender aquellas voces que claman por alguien porque así le conviene a él o a su pandilla; hay que desoír a los que sugieren, los que deslizan, los que proponen, los que chillan, los que suplican o, peor, los que amenazan para que su candidato sea el elegido, porque quien recurre a eso no está pensando en el bien común, sino el interés particular, muy particular y muy egoísta.

--Mientras cualquier hijo de vecino, ya viejo, cansado y sin ilusiones, mendiga porque en la jubilación le vaya más o menos bien, don Onésimo Cepeda no se anduvo por las ramas.
De una vez y de chingadazo se agenció 130 millones de dólares.
Nomás ahí como fondito pa’l retiro.
Es un gran argüende que hay en las esferas del Poder Judicial de la Federación y la Suprema Corte con ese caso.
Don Onésimo fue exonerado, así de simple.
Ahora el abogado de la empresa propietaria del lote de pinturas con las que se cobró don Onésimo, culpa a un ministro de la Corte de prestarse a tal robo.
El lote de pinturas vale una millonada de dólares, mucho más que los 130 millones que supuestamente don Onésimo había dado en préstamo.
Caso son cuadros de Martín Abadía, pues.

--¿Ya pusieron a pensar quién será el candidato del PAN a la gubernatura de Chiapas si queda Cordero o Vázquez Mota o Creel o Lozano o Lujambio o cualquier otro?
Hagan sus apuestas.
Va a estar interesante quién le entra dependiendo si el gallo o la polla a la que apoya para la candidatura presidencial triunfa.
En el espectro estatal hay panistas y no panistas identificados con cada uno de los aspirantes presidenciales del PAN.
Bueno, no de todos, pero sí de Cordero, Vázquez Mota y Creel.
De ahí pa’l real, el Lozano y el Lujambio no tienen ni chucho que les ladre en Chiapas.
Saque sus conclusiones e identifíquelos, están muy bien vistos y muy definidos para dónde jalan.

--Es recurrente la esperanza del respetable público que en las campañas de recolección de cacharros también se llevaran la basura polaca.
Es que no es por hablar mal de nadie pero cómo abunda la porquería.
Si un día una escoria se esfuma, desaparece del mapa político, al cabo de un rato vuelve a escena alguien más igual o peor.
Y los hay de los que brincan de un lado a otro, de un partido a otro y todavía se dan golpes de pecho.
O los que traicionan una, dos, tres, múltiples veces y encima de eso quieren que les sigan diciendo decentes.
O los hay los que los domingos van a misa, se confiesan, comulgan, y afuera, en la vida real, no tienen nada de santos y mucho de bandidos.
En fin, toneladas y toneladas de basura política que lamentablemente no levantan como cacharros contaminantes.

--Al parecer Javier Yau Dorri anda muy sensible.
A la menor provocación quiere camorra.
No aguanta nada.
Entonces uno se pregunta ¿pa’ qué se metió a la polaca si no es capaz de aceptar una crítica de sus compañeros de partido?
Uta, es que a cualquier comentario aunque no sea en su contra así los agarra y responde casi queriendo partir madres.
¿Ydai?
La cosa es calmada, como decía Clavillazo.
Hace unos días a un saludo de Perola, de las huestes de Bejarano en San Cristóbal de Las Casas, Yau Dorri se le fue a la yugular.
Ha de creer que le quieren comer el mandado o que le tienen envidia porque es un ser pulcro de la izquierda.
Tan pulcro que se tragó el cuento de Milito Zebadúa, aquel que presumía su corpiño amarillo intentando decir que en el fondo seguía siendo del PRD.
Tan no lo era que acabó en el PANAL y ahora se perfila a ser el líder nacional del partido de la maestra.

--Pa’ que vean que cuando se trabaja bien y se apoya al deporte se sacan buenos resultados.
Villacorzo resultó campeón estatal Sub19 en Basquetbol y eso no es casualidad o resultado de chiripa.
La última vez que Villacorzo con su selección de 19 años había ganado este mismo campeonato fue en 2004.
¿Y quién cree que era el alcalde de Villacorzo en ese año?
Pues ni más ni menos que Jorge Alberto Clemente Magdaleno, quien hoy gobierna nuevamente Villacorzo.
Ahora como entonces le ha dado un gran impulso al deporte entre la juventud de su municipio y los resultados saltan a la vista.
Como decía al principio, no es casualidad sino resultado del esfuerzo, compromiso y apoyo constante al deporte.
¿Por qué no volvieron a ganar desde entonces?, es la pregunta.
¿Por qué se perdieron seis años de no ganar nada?
Simple, porque hubo autoridades municipales a las que les valió máuser impulsar el deporte en Villacorzo.

--El abogado chiapaneco José Manuel Mantecón Vázquez asumió ayer la dirección general de Amparos de la PGR.
Es un reconocimiento al talento y profesionalismo de este joven que ha destacado en el ámbito jurídico.
Por muchos años se desempeñó como miembro del Poder Judicial de la Federación.
Después, a propuesta del gobernador Juan Sabines, fue designado por el congreso del estado como magistrado del Tribunal Electoral del estado.
Ahora despacha desde la Dirección General de Amparos de la PGR, lo que significa un logro más en su carrera profesional.
Para Chiapas debe significar también un orgullo que un joven chiapaneco, un abogado con gran experiencia, esté en las grandes ligas.
Si en nuestro país hay alguien experto en materia de amparos, es precisamente José Manuel Mantecón Vázquez, lo que será de gran ayuda para la PGR.
Ya se verá el resultado de su trabajo, de su conocimiento y su aportación a los litigios de la PGR.
De seguro don Jaime Mantecón Álvarez debe estar muy contento con este ascenso de su hijo.
Ahí está el resultado de su esfuerzo, de su amor y de su enseñanza como padre.
Enhorabuena.

--Ni la burla perdonan, neta.
¿Cómo está eso de nombrar a jefe de cirugías en un hospital regional a uno que no es médico cirujano?
Pues aunque se quede de a cuatro eso pasó en el Hospital Regional Rafael Pascacio Gamboa.
¿Cuál es el mérito del hermano de doña Marta Díaz Carrión?
Con decirle que ni en las prácticas de Medicina nunca le abrió la panza a una lagartija.
¿De dónde sale ahora jefe de cirugías?
De veras, José Aceves se pasa de lanza.
Tan se pasa de lanza que en su reporte del número de cirugías que practican en el hospital puso en primer lugar al finado Rafael Pascacio Gamboa.
Ah, chingar, ¿cómo es posible que don Rafael Pascacio Gamboa después de tanto años de muerto siga operando?
Uta, ese es un caso para La Mano Peluda.

--AVISO INOPORTUNO.
Mandan a decir los del PT que Roger Grajales González no era propiamente un militante de ese partido, sino que lo identificaban como del PT porque cuando repartía, decía: una Pa’ Ti, Dos Pa’ Mí.

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