El Chiapas de Sabines
Mientras el gobernador Juan Sabines está empeñado en resarcir la marginación y pobreza de miles de chiapanecos, así como en potenciar polos de desarrollo del estado, hay quienes dentro y fuera de su gabinete alimentan infiernitos, crean conflictos donde no los hay o inventan escenarios de incertidumbre que únicamente existen en sus cabecitas repletas de odios y carentes de seso, yendo a contracorriente de su jefe político.
El Chiapas que Sabines ha concebido no es el de la confrontación permanente, el del linchamiento a adversarios políticos o, peor, la invención de pleitos con cadáveres políticos. El Chiapas de Sabines, y eso es evidente en sus actos, es el del reconocimiento al contrario, el respeto a la diferencia y el de la dignificación de los más desprotegidos y olvidados (los viejitos, las mujeres, los analfabetas, los campesinos y los indígenas).
No puede el mandatario chiapaneco detenerse en escarceos sin sentido o inexistentes. La tarea de todo gobernante es construir, lograr acuerdos, ver hacia delante, proponer, llevar justicia a donde no la hay, reivindicar a los pueblos y darle a cada chiapaneco la oportunidad de crecer, de ser mejor y ampliar el horizonte de vida. Para ello, es necesario que sus colaboradores se sumen y no sean obstáculos o vayan a contra flujo.
¿En qué le sirve a Sabines o al gobierno el regodeo de linchamientos públicos? Un gobierno joven, lleno de entusiasmo y carisma, de compromiso y visión de futuro, como el que tiene Chiapas, no necesita de venganzas, de odios o de revivir difuntos políticos con el único afán de entretenerse o meter al mandatario en una dinámica de desgaste innecesario, cuando puede poner toda su energía a la construcción de un Chiapas digno, diferente.
--El Jesús Aparicio Sánchez, alcalde de Jitotol, salió demasiado bueno pa’ la paga y no da paso sin huarache.
Es en toda la expresión de la palabra una fichita bien hecha.
Nomás lea y muérase de la envidia o de coraje.
Se compró una casa en la colonia Albania Alta de Tuxtla Gutiérrez, con valor de 600 mil pesos.
Adquirió una residencia en San Cristóbal, muy cerca de Mercaltos.
La casa está pintada de verde con naranja, por aquello de la alianza con Convergencia.
Posee un rancho en el ejido Ocotal, el cual electrificó y llenó de ganado, aprovechando que es alcalde.
Y para que no digan que es pichicato se compró varios terrenos en la cabecera municipal de Jitotol.
Para estar a la altura de todos los bienes, en una sesión de cabildo Aparicio Sánchez se subió el sueldo como le dio su gana.
También incluyó en el paquete a sus más cercanos cómplices, perdón, colaboradores.
Entre ellos, el tesorero municipal, Antonio Ballinas, y el de obras públicas, Gildardo López.
Por supuesto no podían faltar su cunca el secretario municipal, José Luis Morales, y el director agropecuario, Francisco López.
Nomás para que se dé una idea, en pura nómina Jesús Aparicio Sánchez cobra 45 mil pesos mensuales.
Eso sin contar las otras entradas, que deben ser muchas y de un montón de paga.
Los negocios en Jitotol son florecientes y jugosos, y se hacen en la más absoluta impunidad.
La pavimentación de tres kilómetros de Jitotol a la comunidad El Duraznal es un ejemplo.
El dueño de la constructora que realizó la obra es del propio director de obras públicas.
Por otro lado, este alcalde y sus colaboradores son depredadores del patrimonio del ayuntamiento.
El quinto regidor, Fernando Hernández, hizo pedazos una camioneta último modelo en un accidente.
Y el propio alcalde acabó con una Ford Lobo en un accidente cuando iba al DF a una convención del peje.
Lo peor es que ninguna autoridad dice nada.
--Las autoridades educativas deberían ponerse truchas en los casos de denuncia de acoso sexual.
No que nomás se preocupan en los casos de ocaso sexual.
Hay una denuncia en la preparatoria de Mazatán, donde es señalado un tal Héctor Escobar como el acosador.
A pesar de la denuncia el director de la preparatoria, Carlos Chiu Villarreal, se hace ojo de hormiga.
No se atreve ni a preguntarle al maestro acosador cuál es su técnica de acoso a las niñas.
Cuantimás que lo encare y lo ponga a disposición de las autoridades educativas o judiciales para que lo encierren por libidinoso.
¿Será que el director de la prepa no hace nada por que él también tiene su propia historia?
¿Acaso le dicen de apodo el cupiolo por pura casualidad u ocurrencia?
Algo debe haber que justifique ese apodo relacionado con Cupido.
--En el PAN las sinvergüenzazas están a la orden del día y eso que según sus militantes son muy persignados.
Se reparten las candidaturas y posiciones políticas entre las familias más encumbradas, valiéndoles el qué dirán.
Ni se sonrojan cuando alguien les reclama en su cara o maldice por sus arrebatos.
Es el caso de Carlos Palomeque, quien sin ningún tipo de bochorno, impuso a su mujer en la planilla de César Serrano.
María Nela Ramos Rincón, aparece como regidora en la planilla del PAN a la alcaldía de Tuxtla Gutiérrez.
Ella es nada menos que esposa de Palomeque Archila y sobrina de Victoria Rincón Carrillo.
¿Ya le cayó el veinte de por dónde viene el peine?
Y como tienen muy claro que no van a ganar, la van a imponer como plurinominal en la planilla ganadora.
Es decir, Palomeque está garantizando su paga en los próximos tres años a través de su mujer.
No cabe duda que estos panistas para ser sinvergüenzas se pintan solos.
--Mario Aguilar, candidato del PRI a la presidencia de La Trinitaria, tiene más cola que un tejón.
En su haber tiene una demanda penal por agenciarse un dinero que no era suyo.
En las elecciones internas del PRI, Mario Aguilar operó en La Trinitaria la candidatura de Julián Nazar.
Para comprar votos, se pidió dinero supuestamente para comprar fertilizante, pero se lo clavaron.
Hay dos fichas de depósito, una a la cuenta de Julián Nazar y otra a la de la CNC.
Si del dinero no saben nada los campesinos, menos que sepan del fertilizante.
--Bien dicen que el que es perico donde quiera es verde y cochi que come pollito aunque le quemen el hocico.
Es el caso de Claudia Trujillo, secretaria del ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez, que no puede negar su naturaleza.
Se las trae contra las secretarias de la presidencia municipal.
En forma por demás grosera las amenaza y acosa para que renuncien a sus plazas.
Incluso, llega al extremo de asegurar que si ella lo ordena no podrán tener trabajo en el gobierno del estado.
De mi cuenta corre que no tengas trabajo en estos seis años, grita con prepotencia, inflando los ojos como sapo hasta casi explotar.
¿Tiene autorización para ser tan déspota o lo hace por la libre?
¿De veras tiene el poder como para decidir si les dan o no trabajo a las secretarias los próximos seis años?
--Lea la columna Confines en www.jjbalcazar.blogspot.com y escriba al confinero a jjbalcazar@hotmail.com
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