Cimentación democrática
El escenario actual de Chiapas, en la antesala de la renovación de ayuntamientos y congreso local, reclama a políticos que sobrepongan su interés y compromiso con la estabilidad y el progreso del estado, desplazando a los resentidos, a los rijosos y a los que les pesa más sus odios que sus propuestas, sus frustraciones que aspiraciones de bienestar o los que se niegan a la suma de esfuerzos y a la búsqueda colectiva de bienestar.
Los partidos políticos tienen la obligación de postular no sólo a sus mejores cuadros, sino a quienes tengan claro que su deber es trabajar por Chiapas. No solamente es atender reclamos de antigüedad en la militancia, chantajes o ambiciones, porque el ejercicio de la política es más amplio, demanda seriedad y exige de perfiles que sumen, que construyan, propongan, estimulen y ayuden a sacar adelante al todavía deprimido estado.
¿Para qué serviría, por ejemplo, un político resentido en el congreso? ¿O un maniático como alcalde en cualquier ayuntamiento? ¿En qué le serviría al estado perfiles como esos? ¿Ganaría la gente con una confrontación permanente? Por supuesto que no y por ello los partidos deben llevar como candidatos a quienes, sin agachar la cabeza o arrastrarse, sean capaces de lograr acuerdos y construir la alternativa conjunta de desarrollo.
Es en la lista de pluris donde los partidos deben analizar muy bien el perfil de sus candidatos. Poner en la balanza de pros y contras, de beneficios y perjuicios, a quién conviene postular. ¿Uno desbocado o uno sensato y objetivo? ¿Uno que apela al odio y la venganza o uno que plantea el acuerdo y la conciliación? ¿Uno que atiende resentimientos personales o uno que privilegie tolerancia y respeto al disenso? He ahí la decisión.
--En política los ciclos se cumplen, se cierran o simplemente se acaban y eso lo deben entender los políticos.
Aferrarse al hueso o pretender hacerse el muertito cual tacuacha mañosa, no es saludable.
Hay que mirar para adelante y darle la bienvenida al reto siguiente, bueno o malo, como sea.
Claro, hay ciclos que concluyen para bien o para caer pa’rriba, como dicen.
En ese sentido hay muchos ejemplos en la actual coyuntura política del estado.
Son varios los funcionarios del gabinete que deben bajar la cortina para lanzarse a una nueva encomienda política.
Y todos ellos (sin excepción alguna) van en condiciones inmejorables, incluso, envidiables.
Desde el congreso del estado podrán demostrar su lealtad y apoyo al gobernador Juan Sabines.
Es la mejor oportunidad para servir con decoro.
La postulación es, además, un reconocimiento del mandatario, de las dirigencias partidistas y del pueblo chiapaneco.
Es una situación, si se quiere, de privilegio político.
En esa categoría se encuentra Horacio Schroeder Bejarano, quien va de pluri en el PRD.
Sin duda una excelente decisión de ese partido al llevarse uno de los funcionarios más capaces del gabinete.
Con Schroeder de diputado gana el PRD y gana Chiapas.
Lacho es garantía de eficacia, capacidad y lealtad que enriquecerá la propuesta legislativa en el estado.
Así lo demuestra la anuencia del gobernador para que se vaya de diputado.
Hacer un buen papel en el congreso será el mejor testimonio de Schroeder de agradecimiento a Sabines.
Ser distinguido con la amistad y confianza no es cualquier cosa, hay que responderla con lealtad y gratitud.
Ahora es tiempo que Schroeder empiece su camino hacia el Poder legislativo.
Un camino pavimentado, libre de obstáculos, para transitarlo con la cabeza en alto.
¿Para qué alargar la estancia en el gobierno? No tiene razón de ser.
A lo único que se expone es a que lo señalen de chambista, lo cual no es cierto.
Como dice Juan Gabriel ¿pero qué necesidad?
--Lo que es no tener vergüenza y, si no lo cree, pregúntele a Marranito Díaz Ochoa, candidato del PRI-Verde a la alcaldía de Sancris.
Como todo cara liza que es dice que no buscó la candidatura, sino en una encuesta salió nominado.
Poquito faltó para que dijera que le rogaron para que aceptara ir por la presidencia municipal.
Uta, no cabe duda que es un cínico de primera clase, de los que tienen membresía de sinvergüenza.
¿Cómo se atreve a ser tan mentiroso al declarar que ni quería ser candidato, sino que por su popularidad lo pusieron?
¿Acaso no fue él quien le lloró amargamente a Arely Madrid que le diera la candidatura?
¿No fue él quien rogó de rodillas que lo hicieran candidato?
¿Ya se olvidó que fue tanto su suplicio que Arely le tuvo que hablar claro y pelón de cómo estaba la cosa de las candidaturas?
¿Quién fue entonces el que indignamente decía “sí, gobernador”, “lo que tú ordenes, gobernador”, “seré leal, gobernador”?
¿A poco no fue él a quien esa noche Arely chamaqueó haciéndole creer que en realidad hablaba con el gobernador?
¿Ya se olvidó que hasta se meó de emoción cuando concluyó la llamada por teléfono con el imitador del gobernador?
Si no fue él, ¿entonces quién fue al que Cara de Hacha cotorreó haciéndose pasar por el gobernador?
--Rafa Cevallos, que todavía no ha entregado sus tiliches del Codecoa, ya le mandaron a su sucesor.
Trascendió que el secretario particular del secretario del Campo fue enviado como relevo.
Y que aprovechando este movimiento de una vez le dieron aire al secretario privado.
¿Será verdad o será mentira?
--En Yajalón el PRI solito firmó por anticipado su acta de defunción.
¿En qué cabeza cabe que con Rafael Utrilla Robles, hermano de la Coqui, se gana la presidencia municipal?
Para que se lo sepan Rafa, más conocido como el elote, es un caemal hasta con doctorado en pedantería.
Y no sólo eso, tiene una gran deuda con el gobierno del estado por el mal manejo de una unión de crédito.
Son millones y millones de pesos los que el elote debe y no paga.
Por eso en Yajalón la gente se pregunta ¿para qué quiere el elote ser presidente municipal?
Ni modo que sea para hacer obras de caridad o hacer un apostolado a la honestidad.
Todo mundo jura y perjura que el elote quiere ser presidente municipal para resolver sus broncas económicas.
Lo mismo que su hermano la Coqui Utrilla que donde quiera que vaya le mientan su santa mamacita.
No lo bajan de chaquetero, sinvergüenza y oportunista que sólo se ha aprovechado de los cafetaleros.
Y qué más que la meritita verdad.
¿Con todos estos antecedentes de estos dos lindos hermanitos, el PRI aspira a ganar Yajalón?
Pero ni en sueños.
Ni los propios priístas se tragan el cuento del arraigo del elote para haber sido elegido candidato.
Fue una burda y descarada imposición que ni encomendándose al señor de Tila tendrá la bendición.
Lo más seguro es que se lo lleve la tiznada y acabe en El Pulpitillo tirado como un olote manchado de caca.
--Lea la columna Confines en www.jjbalcazar.blogspot.com y escriba al confinero a jjbalcazar@hotmail.com
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