febrero 18, 2007

Confines, 19/Feb/2007

Paco loco al desnudo


Hoy se realizará la primera audiencia de conciliación entre la Sedesol y los más de 100 trabajadores despedidos por Francisco Rojas Toledo, el cínico delegado que los corrió porque así le dio su gana y porque así convenía a sus intereses partidistas con miras a meter a la nómina a sus amigos, aliados panistas, incondicionales y uno que otro pariente. Para ello no reparó en lo que establece la ley laboral ni en ninguna estúpida regla ética.

Con razón, los trabajadores despedidos “de manera arbitraria, prepotente e injustificada” se preguntan cómo la secretaria María Beatriz Zavala Peniche sostenga en el cargo a Rojas Toledo, quien ha demostrado en poco tiempo su ineficiencia e insensibilidad social al frente de tan importante encargo. No se necesita ser brujo para darse cuenta de eso. Era previsible que al nombrar a tan indeseable doctor, las cosas serían como resultan ser.
Los propios trabajadores lo acusan de actuar de manera absurda y cancelar programas exitosos de ayuda social, como en Las Cañadas de la Lacandona que se quedó sin la presencia de la Sedesol, así como en las regiones de reconstrucción devastados por el huracán Stan. También despidió a todos los técnicos de la Red Estatal de Microrregiones, cuyo programa obtuvo reconocimiento en 2006. Todo por sus purititos calzones.
De ahí las preguntas que se comparten con los trabajadores despedidos: ¿El plan es desaparecer la Sedesol en Chiapas? ¿El gobierno de Calderón es capaz de mantener a sangre y fuego, a costa de lo que sea, a un delegado tan ruin e inepto? ¿Si el ánimo es asegurar la delegación como una parcela de poder, no hay otro mejor del PAN que se haga cargo? ¿En la idea de hundir a Paco loco no importa llevarse entre las patas a la Sedesol?

--Uta, qué encarnizado está el pleito por las pluris en el PRD, los odios desatados y al tentar las injurias.

La semana pasada el confinero hizo un comentario sobre las dos primeras pluris seguras del PRD.
Una de ellas para Carlos Esquinca y la otra para Alejandra Soriano, según ellos mismos.
¿Pa’ qué chingaos fue a hacer ese comentario el confinero?
De vendido no bajaron al confinero, de inútil a Carlos Esquinca y pobrecita loca y oportunista a la Alejandra Soriano.
Una cosa:
Si tanto es el aborrecimiento a Esquinca y a la Soriano ¿por qué jodidos meten al confinero en ese pleito?
Si Esquinca es un inútil y la Soriano una desleal y convenenciera ¿qué pitos toca el confinero en esas apreciaciones?
¿Por qué en lugar de escribirle un correo electrónico al confinero, mejor no encaran a Esquinca y a la Soriano?
¿Por qué no les dicen a ellos dos sus verdades en su mera cara?
¿Qué jijos de la fregada tienen que andar metiendo al confinero en esos descuartizaderos perredistas?
Si Esquinca es un monigote y la Soriano una descerebrada, pues ¿para qué chingaos se dejan meter a esos troncos de dirigentes?
Si Esquinca no sirve ni para atrancador de puerta y la Soriano ni para empleada doméstica, ¿por qué no se rebelan contra ellos?
Si Esquinca no da el ancho ni la Soriano señales de por lo menos una neurona en su cabecita, ¿qué le exigen al confinero?
Esas son broncas internas de los perredistas y si no son capaces de aclararlas ni de resolverlas, muy su pex.

--Que se echará a andar un programa de guardianes de la salud en cantinas y puteros de varios municipios de Chiapas.
La intención de este programa, según Chus Lizárraga, es que en esos centros de esparcimiento no se venda droga ni ejerza la putería.
Todo en el afán de que los bolos se revienten sus buenos tragos sin que sean tentados por cosas malas.
Sobre todo porque el bolo, por muy fiel que sea o por mucho miedo que le tenga a su mujer, no deja de ser de carne y hueso.
Y la carne es débil.
Por eso está bien que se ocupen de la salud y seguridad de los bolos.
Que puedan ir a la cantina con la certeza que ni drogas ni putitas quebrantarán su reputación.
Para que los bolos sigan siendo santurrones y puros, que sólo les baste la sangre de Cristo.

--Luego se nota la calidad de la melcocha en la parte operativa de Los Jaguares de Chiapas.
Con la llegada de Juan Carlos Esquinca como operador financiero del club de futbol las cosas han cambiado.
Por ejemplo, el estadio Víctor Manuel Reyna se ha visto más lleno de aficionados.
No cabe duda que ha sido una excelente adquisición.

--Como diputado votó a favor de aplicar de 3 a 9 años de cárcel en el delito de difamación.
Hoy como gobernador no podía ir contra ese voto suyo.
Así de congruente es la vida del gobernador Sabines.
Y así quedó tipificado el delito de difamación en el nuevo código penal del estado, aprobado por el congreso.
Si algo hay que festejar es la coherencia del mandatario chiapaneco.

--¡Qué bueno que la ortografía, la sintaxis y la semántica no pueden acusar a los periodistas de difamación!
Ni de difamación ni de homicidio, bendito sea Dios.
Si pudieran hacerlo, muchos estaríamos en El Amate desde el primer momento de publicar.
Empezando por el confinero, cuya escritura no puede ser más repugnante.
Habemos quienes no sólo difamamos a la escritura; la matamos cotidianamente.
En cuanto advierten, las palabras, que un columnista tan irritante como el confinero se sienta frente a la computadora, sufren, casi se infartan.
Ora sí, pobres palabras, como escribió Octavio Paz, dales la vuelta, cógelas del rabo (chillen, putas).
Azótalas, dales azúcar en la boca a las rejegas, ínflalas, globos, pínchalas, sórbeles sangre y tuétanos, sécalas, cápalas, písalas, gallo galante.
Tuérceles el gaznate, cocinero, desplúmalas, destrípalas, toro, buey, arrástralas, hazlas, poeta, haz que se traguen todas sus palabras.

--La reconstrucción de la zona devastada por el huracán Stan no se ha detenido por ningún momento.
Ese fue el compromiso de Juan Sabines y ese ha sido la tarea continua de Julián Domínguez.
Ahora puede constatarse por qué el gobernador invitó a Julián a sumarse al enorme reto de reconstrucción.
Además de chiapaneco, Julián se destacó en los primeros momentos de la devastación como colaborador eficaz de Josefina Vázquez Mota.
Ese fue el momento en que se le echó el ojo para después incorporarlo a la reconstrucción de la costa, sierra y soconusco.
Nadie mejor que Julián para ese enorme trabajo de devolverle la vida digna a los afectados.
Julián tiene lazos afectivos en la costa, especialmente con la familia David.
De hecho ha sido colaborador de Sami David en varias etapas de la vida política del acapetahueño.
Por eso, los afectados de la costa, el soconusco y la sierra tienen en Julián Domínguez a un aliado de tiempo completo.

--Lea la columna Confines en www.jjbalcazar.blogspot.com y escriba al confinero a jjbalcazar@hotmail.com

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