Confines 22/Agosto/2011

Visa maldita

Todo mundo coincide en que eliminar la visa, exigida a los ciudadanos de los países de Centroamérica, para la entrada a Chiapas, será la solución a tantos, difíciles y vergonzantes problemas que enfrentan las personas que cruzan la frontera generalmente en su ruta hacia los Estados Unidos, ya que en nombre de ese papelito son extorsionados o, en el caso de mujeres, sobre todo a las menores de edad, obligadas a prostituirse o pasar por las armas de agentes de migración sin escrúpulos que denigran a todo el país.
Defensores de derechos humanos, de las llamadas ONG o de instituciones autónomas del gobierno, pero financiadas y sostenidas por éste, asumen que al quitar la visa como requisito para ingresar a México por la frontera de Chiapas ayudará a acabar con un lastre que por muchos años ha ofendido a naciones enteras de Centroamérica, quienes han demandado con justa razón (como México lo hace ante los gringos sin éxito) que se respeten a sus connacionales y se les dé un trato digno y humanitario.
En el caso de Chiapas, hay que decirlo, el gobierno de Juan Sabines ha dado pasos sustanciales en la reivindicación de los derechos humanos de los migrantes. Se eliminó la palabra ilegal de las leyes, lo que en apariencia no significa nada, pero implica todo un cambio en el trato, en la visión y en el respeto hacia quienes llegan a nuestro estado sin sus papeles en regla y no por eso son ilegales, porque nadie, como ha sostenido Sabines, nace ilegal, y buscar mejores condiciones de vida no hace a nadie delincuente.
La eliminación de la visa, sin embargo, no es tema de un estado, sino del gobierno de la Federación. Por más voluntad y por mucho que las leyes de Chiapas estén en la vanguardia de la legislación en materia de respeto a los derechos humanos de los migrantes, de combate a la trata de personas, de apoyo a los migrantes con techo y alimentos, de impulso a la buena vecindad y otras iniciativas de reivindicación humanitaria, la visa seguirá siendo tema que se interponga para acabar en definitiva con todos los males.

--Hoy será día de carreras, de embotellamientos, de andar al tentar, de llegar tarde, de echarle la culpa a todo menos a uno, en fin, un día de primer día de clases.
No faltarán los que se queden dormidos o los que hasta le peguen un manotazo al despertador.
Algunos de plano se irán apareciendo por ahí del miércoles, sin bien va.
Capaz que se echan toda la semana y llegan hasta el lunes con sus caras de yo no fui.
La cosa es que a partir de hoy empieza el bullicio de muchachitos en todas las escuelas de Chiapas.
Y como dice el secretario de Educación, Javier Álvarez, todo será con normalidad.
No habrá sobresaltos, porque la maestrada está contenta, o por lo menos conforme, con sus logros laborales.
No hay pretextos para no ir a dar clases.
La apuesta es que este ciclo escolar sea mejor que el anterior.
Ojalá.

--Ya quisiera Ernesto Cordero ser como el gusano Rojas o la guerrera Ana María Torres, para haber llenado la arena Metropolitana de Tuxtla ayer.
Apenitas y llenaron la parte de abajo.
Y eso que hubo tortas y refrescos de gorra.
No llenó ni llegó al doce asalto.
Así se cuentan los amigos de Cordero en Tuxtla.
¿Por qué Cordero si llega a Tuxtla en calidad de precandidato del PAN a la candidatura presidencial?
¿Por qué no llega como secretario de Hacienda, que es como se necesita más?
Neta que si realizara una gira como secretario de Hacienda anunciando una millonada de pesos para Chiapas, se echara a la bolsa a cual más.
Pero así, con un discurso simplón, no jala nada.

--Resulta que el líder moral del sindicato de salud, Víctor Hugo Zavaleta Ruiz no es tan moral.
¿Cómo está eso?
Pues va usted a creer que el fulano que se siente una blanca paloma tiene unos pendientes con una inocente blanca y pura.
Ha sido demandando en el juzgado de San Cristóbal porque se hace pijiji para cumplir con sus obligaciones de padre.
Todo un caso para la señorita Laura.
Haber con qué sale.
No vaya a salir con que es un complot de sus enemigos para desprestigiarlo.
Que agradezca que sólo el 15 por ciento de salario de salud se le está requiriendo.
De lo que se embolsa en el ayuntamiento, que raya en los 50 mil pesos mensuales, no le están pidiendo nada.
Hasta ahorita.

--Tiene razón el rector de la UNACH, Jaime Valls, que con el apoyo del gobierno federal y estatal la universidad se fortalece.
Se fortalece en excelencia educativa, en la internacionalización y la vinculación.
Es la primera vez que la UNACH traspasa las fronteras para ofrecer su catálogo académico.
Y ofrecerla a chiapanecos es doblemente trascendente.
Se cumple con ello de ser una universidad para los chiapanecos, con el agregado de estén donde estén.
En este caso, será para los chiapanecos que viven en los Estados Unidos, a donde se fueron de migrantes.
Es una de las ofertas y acuerdos que suscribió el gobernador Sabines en su estancia en Los Ángeles.

--Por cierto, oír la marimba, cantar el himno a Chiapas o comer caballito, turulete, gaznate, chimbo o suspiro fuera del país debe ser conmovedor.
Uta, a quién no se le enchinaría la piel.
Si el confinero nomás al cruzar el portón de La Mesilla ya siente nostalgia por Chiapas, imagínese los que viven en Los Ángeles u otros lados.
Debe ser perturbador en el buen sentido de la palabra.
Cuántos sentimientos no se generan al encontrarse con personas o cosas que te lleven de regreso, con el recuerdo, al lugar de origen.
Sin duda que en su estancia en Los Ángeles, el gobernador Sabines ha provocado todo eso.
Y más con los anuncios hechos o la apertura de la Casa Chiapas.

--Para que se dé una idea de cómo los chiapanecos se resisten a dejar atrás costumbres, gustos y la tierra, ahí le va un anécdota.
Conocido por muchos es la historia del Jamaicón que a mitad de una gira por Europa se regresó.
Extrañaba, dijo, el frijol.
Pero esta anécdota no es de ese futbolista famoso.
Es la historia del cachi.
Se fue a estudiar un doctorado en Agricultura a España y consigo llevó, al saber cómo le hizo, un costal de chipilín seco.
Pero no sólo eso, entre las páginas de sus libros llevaba rebanadas de queso seco.
Nomás que de eso se olvidó y al pasar los meses el queso dentro de los libros se fue fermentando.
Llegó un día en que la universidad no soportaban el hedor de patas y se veían unos a otros como echándose la culpa.
Y como nadie daba su brazo a torcer, empezaron a ver de dónde surgía tan penetrante olor.
Fue así como llegaron al morral de cuero crudo del cachi y descubrieron pedazos de queso con gusanos y pelusa verde de hongos.
Casi le cuesta la expulsión de la universidad, pero se ganó a sus compañeros cuando los invitó a comer tamal de chipilín.

--San Cristóbal de Las Casas está quedando de peluche.
La remoción que se hace del centro histórico está resultando un éxito visual para habitantes y visitantes.
De ahí que haya toda la razón para emprender una campaña contra anuncios que contaminan visualmente.
No se vale que empresas foráneas rompan con el reglamento municipal de construcción.
O se someten al reglamento o que chiflen a la suya.
Es el mismo caso de los que dicen que el grafiti es artístico.
En realidad el grafiti no propone nada ni tiene nada de artístico.
Por eso la campaña a favor del grafiti artístico que se gesta en San Cristóbal no tiene razón de ser.
Sobre todo siendo una ciudad que vive de su arquitectura, su cultura, gastronomía y otros servicios.
Nadie va a San Cristóbal a ver los grafitis, ni que estuviera uno pendeco, como dice Lupe.

--Ahí va una pregunta que Alberto Burguete Chanona debería responder.
¿Qué tanto llega a hacer todos los sábados en la mañana su entenado Navarro González a un despacho cerca del restaurante London?
¿Cuota de qué es la que cobra?
¿Qué idilios se trae con el abogado de un banco, un tal Jonathan Emanuel González?
¿Será que es su contacto para el embargo de cuentas bancarias de algunos municipios?
¿O será que recuerdan viejas andanzas en La Salazar cuando despachaban en la cantina K 2 de doña Huevo?
¿Y qué tanta influencia ejerce Luis Enrique Pastrana López con ellos en el Tribunal Burocrático?
Hay un chingo de preguntas que deben responder.
¿Y así se las gastan de muy pulcros?
¿Y así le tiran al perdón y a que les den nuevos cargos en el Poder Judicial?
¿Tan jodidos estamos?
¿Y el compadrazgo con Pablo Salazar no es digno de reconocerse e irse por dignidad?
¿O no hay dignidad?

--AVISO INOPORTUNO.
Ya ni el monito Rodríguez, aquel famoso preparador físico de El América, se aferró tanto al puesto; cuando se agotó el tiempo, renunció. Lo mismo hizo Zamorita y lo mismo debería hacer Alberto Burguete Chanona.