Confines, 05-Dic-2006

El salto educativo

Un tema que vale la pena resaltar del informe de Pablo Salazar es el educativo. En un pueblo tan jodido como el nuestro, con maestros de medio pelo y alumnos víctimas de sus insuficiencias, humores, frustraciones, complejos y traumas, no es tan alentador el panorama. Sin embargo, con un esfuerzo institucional sin precedente y con un secretario de Educación comprometido y talentoso, como Alfredo Palacios, se tuvo un logro trascendental.

Por eso Pablo Salazar puede presumir ahora, rayarle en la cara a sus detractores, que este sexenio que concluye la educación fue la prioridad de prioridades y los resultados están a la vista. Los fenómenos de reprobación, deserción y analfabetismo fueron combatidos eficazmente y nuestro estado, que quiere decir nuestros niños, ya no ocupan los lugares vergonzosos en la media nacional y tan dramáticos como al principio de este gobierno.

Un aliado excepcional del gobernador Salazar lo fue sin duda Alfredo Palacios, un hombre culto y una experiencia educativa de toda la vida. Por ello es importante que un gobernante sepa elegir a su secretario de Educación, para avanzar en un tema que, además de importante, es urgente, es fundamental para resarcir las hirientes condiciones de desigualdad, pobreza, marginación e injusticia a que condena el desconocimiento.

El escenario en materia educativa, aunque ofenda a los necios, es diferente del 2000 al de ahora. Ha cambiado en mucho. Empezando por la relación de la autoridad educativa y el magisterio. Antes, en una complicidad descarada (que por cierto le tocó al maestro Víctor Ancheyta), sindicato y gobierno se repartían el pastel producto de la corrupción. Ahora la relación es más transparente, de compromiso. Condición que debe prevalecer.

--Los saldos de Jorge Ordóñez en la Universidad Autónoma de Chiapas es espeluznante, por decir lo menos grotesco.
Según él dejó a la Unach con una deuda pequeñita, casi insignificante.
Lo cierto es que deja a la universidad con sus finanzas hechas un desastre.
Incluso, la Unach será la única universidad de todo el país que el próximo año no recibirá el apoyo denominado PIFI.
Es un recurso millonario que dejará de llegar a la Unach y que impactará negativamente en salarios de docentes.
Esa es la herencia de Jorge Ordóñez.
También deja otros pendientes, de los cuales culpó a Ángel René Estrada Arévalo que apenas ayer asumió la rectoría.
Uno de esos pendientes es la deuda de dos meses de salario a los docentes que cursan doctorado en el extranjero.
Piensa que los docentes son ingenuos para tragarse el cuento.
Es la hora que no le depositan las becas y salarios de noviembre y diciembre.
Lo único que les ha mandado a decir Jorge Ordóñez es que la culpa de ese retraso lo tiene el nuevo rector.
¿Cómo se atreve a decir semejante mentira?
¿Cree que los docentes en el extranjero se están chupando los dedos para tragarse tan disparatado cuento?
Lo único bueno de esta pesadilla macabra en la colina universitaria es que Ordóñez ya se fue.
Lo malo es que se anda pavoneando diciendo que se va como director del COCYTECH en lugar de Villers Aispuro.
Eso sería una tragedia para la ciencia y tecnología del estado.

--Ni gracia tiene Jorge Ordóñez para ser tan mentiroso.
Tanto que echó pestes contra el meco Lescié y al final hizo exactamente lo mismo, pero con torpeza.
El meco Lescié agració a sus empleados cercanos con plazas de tiempo completo, como Hugo Villar Pinto.
Pero lo hizo de tal manera que ya no pudiera revertirse tales muestras de afecto.
En cambio, Jorge Ordóñez es tan bruto que trató de hacer lo mismo, pero la chamarreó toditita.
Entregó entre sus allegados más de 50 plazas de tiempo completo, pero las firmó con fecha 15 de diciembre.
Es decir, todas son plazas balines, como las que firmó su secretario académico.
Un rector, ni nadie, no pueden firmar plazas a posteriori.
Si su periodo como rector concluyó el 4 de diciembre hasta ahí llegó el poder de su firma.
Así es que las plazas que entregó a sus empleados cercanos valdrán para pura tiznada.

--El gran mérito de Herminio Chanona para ser secretario de Educación es que trabajó con el sargento Rorro.
Bajo el mando de ese legendario sargento, Herminio se desempeñó como coordinador administrativo.
No fue en el Cobach ni en otra encomienda del ahora gendarme de la papaya.
Herminio estuvo al mando del sargento Rorro en el Consejo Estatal de Seguridad Pública.
¿Se acuerda?
Fue parte de los que acusaron al señor de Orantes de haberse embolsado millones de pesos en la satánica Procuraduría de Justicia.
Tronco de carta de recomendación.

--Ahora resulta que Muna Dora ofrece sus servicios como limpiadora de expedientes financieros.
Su encargado de hacer el trabajo sucio es un contador oaxaqueño de apellido Santiago.
Por cierto, este contador no tiene nada que ver con el CP Santiago Zenteno de Chiapa, más conocido como el capullito.

--A Carlos Esquinca, líder del PRD, le ha caído como agua de mayo la llegada de las fiestas decembrinas.
Ni mandado a hacer.
Sin necesidad de recurrir a zancadillas, a escupitajos o trampitas, se quitará de encima al tal Margarito Ruiz, que es una ladilla.
Con la llegada de las preposadas, posadas, nacidas y sentadas de niños Dios, Margarito tendrá mucha chamba.
Será contratado por todos lados para trabajar de diablito de pastorela.
Andará tan entretenido y atareado que se olvidará de andar fastidiando a Carlos Esquinca.
De esa forma, el líder del PRD podrá dedicarse a trabajar por ese partido que está muy maltrecho.

--El notario público Gerardo Pensamiento sigue dando pena ajena con su rastrerismo a la actual dirigencia del PRI.
Ayer se le vio en un café italiano de Tuxtla recibiendo órdenes para dar fe de nuevas pruebas de expulsión de priístas.
La neta que es para morirse de vergüenza esa condición sumisa del notario público.
Por esas cosas, que no se llame a sorpresa ni confiese su incredulidad a las críticas del confinero.
El otro día le dijo a un amigo del confinero: Nunca creí que José Juan se atreviera a criticarme.
Y el confinero respondió:
Y yo nunca creí que Gerardo cayera tan bajo, que fuera tan servil.

--Ayer fue un mal día.
Ayer otra vez la estúpida muerte se apareció entre nosotros.
Ayer el tío Raúl Melchor Aguilar murió luego de una semana de luchar contra la muerte.
A su esposa, tía Delfina, y a sus hijos Rosamirian, Híbert, Lizbeth e Iveth un abrazo fuerte.
Ayer también en el rancho Buena Vista, Puerto Madero, murió tío Cata, padre del doctor Ángel René Estrada Arévalo.
A él, a su madre Melina y a sus hermanos, un sentido pésame.
A Cristel, Renata y Coco otro abrazo solidario.

jjbalcazar@hotmail.com