octubre 22, 2006

Confines, 18-oct-2006

La pesca va


No cabe la menor duda que la designación de Carlos Morales como presidente de la comisión de Pesca del Congreso de la Unión es una bendición para los pescadores chiapanecos. Existen todas las posibilidades de ampliar el presupuesto federal para la pesca estatal y revertir la tendencia a favorecer únicamente a estados del norte, como este año que Baja California Sur, Sonora y Sinaloa se llevaron 48 por ciento del presupuesto nacional.

La primera acción del diputado federal chiapaneco fue reunirse en Mazatlán con Ramón Corral Ávila, comisionado nacional de pesca, con quien llegó a acuerdos fundamentales. El primero es que Corral Ávila asista como testigo de honor a la instalación de la comisión de Pesca de la Cámara de Diputados y, segundo, agilizar entre los grupos parlamentarios la reforma a la ley de pesca que no se pudo concretar en la legislatura pasada.

Durante los tres años anteriores no se logró aprobar la reforma pesquera porque siempre existió un divorcio entre la comisión de Pesca de la Cámara y la Conapesca. Pero esa controversia ya no existe y Carlos Morales logró sentarse, en un primer paso, con el comisionado nacional de Pesca, quien contribuirá con la bancada del PAN para que la nueva ley de Pesca sea posible y se impulse la actividad en estados como Chiapas.

Esas son las razones por las que Carlos Morales Vázquez se convierte en un diputado clave para potencializar la pesca en Chiapas, al iniciar con el pie derecho su función como presidente de la comisión de Pesca, acordando trabajar conjuntamente con el titular de Conapesca la ley de presupuesto en materia de pesca, donde los pescadores chiapanecos resultarían, sin duda, los grandes beneficiarios con mayores recursos y atención permanente.


--Está cabrón el oportunismo en los foros de consulta de Sabines, cual más se hace el aparecido y hasta se quiere lucir.

En Pichucalco, donde fue el foro de Desarrollo, unos son los que se rajaron el cuero y otros los que quisieron beneficiarse.

El organizador del foro fue el diputado Saraín Osorio, quien se aventó el tiro de invitar a doña Ifigenia Martínez.

Con la presencia de este mujerón de la izquierda, el diputado local le dio lustre a su foro de consulta.

La participación de doña Ifigenia le dio catego al foro, pero hubo otros que la acorrientaron.

Uno de ellos fue chus Orantes que, con su paliacate mugroso atado a la nuca, quiso pasarse de vivo.

De la nada apareció y trató de colgarse medallas.

Obviamente todo mundo se dio cuenta que no es más que un oportunista que quiso caravanear con sombrero ajeno.

La pobre de doña Ifigenia casi se vomita cuando le llegó el tufazo del paliacate mugroso del líder cañero.

Otro cínico que se coló y se presentó como sabinista de hueso colorado es Lemus Kourchenko.

Quiso aparentar lo que no es, porque en el proceso electoral fue un promotor de Aguilar Bodegas.

Hizo campaña contra Juan Sabines en todas las pesquerías de la Costa y ahora ya dice que es sabinista.

Eso por supuesto lo saben muy bien los 90 líderes pesqueros que participaron en el foro de Pichucalco.

Ellos pueden dar cuenta que Lemus Kourchenko es toda una fichita, que fue corrido de subdelegado federal de Pesca por bandido.

Que vendía los permisos de pesca.

También pueden dar fe de cuando lo cachetearon, amarraron y lo iban a colgar en el puente El Capulín, en Cabeza de Toro.

Otro que se hizo el aparecido en el foro de Pichucalco es Ramón Mejía, exdelegado de Pesca.

Muy campantes, como si nada hubieran hecho ni despotricado contra Sabines, andaban en Pichucalco.

Eso es no tener máuser.


--El otro foro de consulta que salió de poca es el de Comitán, organizado por Marco Constantino Kánter y Roberto Albores Gleason.

Se sacaron un diez, aunque no faltó como en Pichucalco el oportunista que miró silla y se le ofreció viaje.

La mayonesa Clemente se sentía realizado en el presidium, cuando jamás hizo nada.

En cambio, Marco Constantino y Roberto Albores Gleason le metieron los kilos.

El resultado fue un foro con la más grande participación de todo el estado.

Las mesas de trabajo estuvieron abarrotadas de gente de todo el estado.


--La presidencia de Rafa Guillén de la Junta de Coordinación Política del congreso local, es la más productiva.

Nomás para que se dé un quemón, en pleno año electoral Rafita logró desahogar la agenda legislativa en más de 40 por ciento.

Cuando asumió la JCP la agenda tenía un avance de 20 por ciento y lo dejará con más de 65 por ciento.

¿A poco no es un logro de poca su?

Pues hay que reconocerle a Rafita Guillén su labor de cabildeo para aprobar las iniciativas de la agenda.

Sin duda, un paso muy productivo el de Rafa Guillén en la Junta de Coordinación Política del congreso.


--Como una prueba que su administración es sana y en orden, Ángel Barrios Zea solicitó al congreso una auditoría a su gobierno.

¿Cómo les quedó el ojo?

A ver si otro alcalde tiene los coyolitos bien puestos y la certeza de un gobierno limpio, para que pida auditoría.

Barrios Zea tiene la certeza por eso ha pedido al poder legislativo que aplique una auscultación a las finanzas.

El presidente de Tapachula demuestra con ello que es un alcalde comprometido con la transparencia.

Ojalá esa actitud de responsabilidad tuvieran todos los presidentes municipales.

No que hay unos que andan a salto de mata, escondiéndose de la autoridad.


--La secretaría de Educación, que dirige Alfredo Palacios, ha desarrollado en este gobierno una espléndida labor editorial.

De eso se dará cuenta mañana con la presentación de la colección Lecturas para entender a Chiapas.

La presentación será mañana a las 19:30 horas, en el auditorio del Centro Cultural de Chiapas Jaime Sabines.

Los libros de esta colección son:

Chiapas geográfico, de Roberto Ramos Maza, y Chiapas económico, de Daniel Villafuerte Solís.

Chiapas religioso, de Miguel Lisbona Guillén, Carolina Rivera Farfán y María del Carmen García Aguilar.

Chiapas arqueológico, de Thomas Lee, y Chiapas histórico, de Sergio Nicolás Gutiérrez Cruz.

Chiapas cultural, de Héctor Cortés Mandujano, y Chiapas antropológico, de Andrés Fábregas Puig.

Chiapas biográfico, de Marisa Trejo, y Chiapas literario, de Jesús Morales Bermúdez.

El último libro de esta colección es Chiapas político, de María del Carmen García Aguilar.


--Con la novedad que el Perro Aguayo, por no haber sido vacunado a tiempo contra la rabia, ya le agarró la enfermedad.

Anda rabioso contra los que aprobaron la reforma constitucional que alarga un año más el periodo de diputados y alcaldes.

Así como los puse, así los voy a quitar, advirtió a los legisladores priístas.

Como cantaba Chico Ché:

¡Uy, qué miedo, mira como estoy temblando!



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