Confines 6/Julio/2012

Caras largas
 
En el ejercicio público hay de todo: hay caras bonitas, hay caras y baratas, hay carotas y caritas, hay caras lisas y caras largas, todo depende de cómo les haya ido en las votaciones, si ganaron por mucho, por poco, a la buena o vil y descaradamente se robaron la elección y si así lo hicieron por igual festejan como si arrebatar un cargo de elección popular a la mala fuera motivo de alegría, de orgullo, de presumir o heredar a sus hijos como un hecho que a ellos les dará en el futuro elementos para aspirar en política.
En la contienda estatal, la votación aplastante de más de 900 mil votos del candidato del PRI-PVEM-PANAL, Manuel Velasco Coello, sobre su más cercana competidora, mató cualquier asomo de sospecha, de litigio o de denuncia de ineptitud e irresponsabilidad en la organización de las elecciones, cosa que no ocurre en algunos municipios o distritos, donde hay expresiones de robo, de alteración de resultados y de negación a la voluntad mayoritaria, llegando incluso a presentarse amagos y violencia.
A las grandes sonrisas de los que ganaron del otro lado están las caras largas de los que perdieron, la mayoría por no traer nada para competir, algunos porque de plano no los quieren en su pueblo o distrito y otros porque fueron víctimas de un atraco en pleno día y los llevaron al baile con votos que obtuvieron los que ganaron por vía de incentivarlos con el acarreo, con la compra, con la promesa de algo, con la mentira o con las artes de seducción que entra por la cartera y en menos que canta un gallo se gasta.
A una elección, efectivamente, se va a ganar o a perder y eso deberían saberlo muchos de los que les metieron tremenda revolcada aun cuando iban con los partidos ganadores en esta elección concurrente de Presidente de la República, de senadores, diputados federales, gobernador, diputados locales y presidentes municipales. Si aun así no lograron cruzar la frontera de la derrota, pues qué jodidos están y en lugar de estar pensando en impugnar, deberían pedir perdón, guardarse en su casa y no aparecer en público.
 
--Sin duda que de quien menos se espera una actitud republicana es de quien llega la pulcritud, la honorabilidad y la madurez para aceptar que se la dejaron ir.
Ahí está el caso de Marranito Díaz Ochoa que no ha dicho ni pío, más bien, ni oing, oing, luego del domingo.
No joceó ni regó el tepache como suele decirse en el caso de humanos aunque en su caso aplicaría que no ha regado el achigual.
Se ha mantenido republicano a la hora de tragar camote y no ha recurrido ni urdido trampas.
A diferencia de Marranito, el que anda queriendo hacer marranadas es Hugo Pérez que no se resigna a haber perdido.
Ya metió en un brete a los consejeros que por prestarse a maniobras sucias ya fueron detenidos.
El muy vivo pretendía rellenar las urnas y eso está prohibidísimo en esta sacrosanta democracia chiapaneca.
¿A poco no?
La cosa es que las marranadas en San Cristóbal de Las Casas no están del lado de Marranito sino de un puercote.
 
--Hablando de puerquitos, otro que le tira a la Procu es el puerquito valiente.
También se ha apuntado con justa razón por méritos propios en materia de justicia.
¡Qué Benito Juárez ni que la chingada!
Abogadazo de mi vidaza.
Es licenciado en diesel, porque dice él que es licenciado.
 
--Hablando de gente no oportunista, quien andaba en el CEN del PRI el domingo primero de julio en la noche era nada menos que Lobas.
No lo pelaba nadie, pero él andaba muy a gusto de metiche en el auditorio Plutarco Elías Calles.
Diga usted ¿qué pictes andaba haciendo ahí?
Muy peinadito, muy humildito, ya ve como es él de sencillito, se pavoneaba entre la multitud.
De seguro habrá venido a Chiapas a presumir que está en el primer círculo de Peña Nieto y se lleva de piquetes de nachas con Videgaray.
En lugar de eso lo que debe hacer es aclarar por qué Peña Nieto no sacó los votos que obtuvo la alianza PRI-Verde en la estatal.
Son casi 400 mil votos de diferencia.
¿Qué hicieron con la paga para operación política?
¿Quién se quedó con el dinero?
Porque de haberla ejercido otro habría sido el resultado.
Claro, nadie niega la popularidad de Manuel Velasco Coello, pero ellos como operadores de Peña Nieto tenían que hacer su mejor esfuerzo.
Lo único que lograron fue hacerse ojo de hormiga y desaparecer la paga.
Nada por aquí, nada por allá.
 
--La excelsa comadre María Candelaria Molina Zepeda es tan cínica que se reincorporó como diputada local a la fracción del Verde.
¿Por qué no lo hizo a la bancada que pertenece, que es la del PAN?
¿Nomás se rentó como candidata?
Nadie le va a creer que su salida del Verde fue de a mentiritas y que se fue al PAN también de a mentiritas.
En política la dignidad es fundamental y las consecuencias de los actos deben asumirse.
Si la comadre de Ocosingo decidió irse del Verde que con su PAN se lo coma.
 
--De veras, no crean que el loro Zebadúa se esconde porque no quiere abrir los paquetes electorales.
Que va.
Si no lo han visto es porque está en cuarentena.
La influenza aviar está de la chingada y hasta escasez de huevos hay.
Claro, esa escasez no es de parte del loro, sino en los mercados y las tiendas.
 
--El diputado Harvey Gutiérrez recibió anoche su constancia de mayoría como diputado federal electo por el distrito de Pichucalco.
Ganó las elecciones por casi 80 mil votos.
Fue una masacre electoral la de ese distrito y ni quien le hiciera sombra.
De hecho, el diputado Harvey Gutiérrez es uno de los que ganaron por el PRI mejor evaluados por el electorado.
Eso mereció que recibiera una carta del CEN del PRI reconociéndole su esfuerzo y aportación electoral a ese partido.
No es por nada pero Harvey Gutiérrez tiene muy trabajado ese distrito.
Durante muchos años ha dado apoyos a gente humilde y especialmente a hermanos de religión de la iglesia a la que pertenece.
Harvey posee un halito de bendición que nuevamente se ha reflejado en las urnas.
Esa especie de divinidad, de comunión con Dios, le ha permitido llegar más allá de la simpatía electoral.
Ha llegado al corazón y afecto de la gente, a la que se debe y a la que deberá corresponder con trabajo y bienestar.
Anoche recibió su constancia de mayoría y se sabe no irá de vacaciones, sino que empezará de una vez a trabajar en lo que viene.
Además, cumple con puntualidad su tarea de legislador en el congreso del estado.
No se desentiende ni se su obligación en la legislatura local ni en la nueva encomienda dada por la mayoría de los electores.
 
--Lo chistoso es que mientras abajo se rasgan las vestiduras, en las alturas todos contentos y sonrientes para la foto.
María Elena Orantes acudió a un encuentro con el mandatario chiapaneco sin poner peros.
Aunque de luto estuvo presente a la invitación civilizada, respetuosa y republicana del gobernador Sabines.
Presentes el ganador Manuel Velasco Coello y los tres perdedores, Orantes, Nivón y Bonilla.
Es una muestra de cordialidad y de que no hay tos y que una vez pasadas las elecciones viene la gran tarea de trabajar por Chiapas.
Y el concurso social incluye a todos.
El que diga que no está interesado en meterse en el enorme reto de trabajar por Chiapas, o miente o está muy jodido.
Las campañas son una etapa de los procesos políticos y ahí no se agota ni las ganas de trabajar ni la esperanza de construir un destino mejor.
 
--Hoy se presenta el libro “La transición democrática de Chiapas. Competencia y competitividad electoral 1991-2012”.
Comentarán el libro el expresidente del TRIFE, doctor Eloy Fuentes Cerda, y el doctor Oswaldo Chacón Rojas, expresidente de la COFEL.
La presentación de esta obra de Jesús Pineda de la Cruz, exconsejero electoral en Chiapas, será a las doce del día.
La cita es en el auditorio Enrique Robles Domínguez del Poder Judicial del Estado.
 
--A propósito del doctor Oswaldo Chacón Rojas, acaba de realizar un interesante estudio de fiscalización electoral para la ONU.
Presentó un proyecto de investigación como parte del Fondo de Apoyo a la Observación Electoral del PNUD.
En ese contexto, dijo que en el modelo actual de fiscalización electoral en América Latina hay algunas debilidades.
Explicó que se trata de un modelo restrictivo, donde las reglas son intrincadas y la fiscalización se realiza después de pasadas las elecciones.
Dijo que se requiere más transparencia y respeto a la ley para hacerlo funcionar mejor.
Además, los topes de campaña son poco razonables y por ello es frecuente que se rebasen.
Oswaldo Chacón encabeza a un equipo de investigadores de la Universidad de Chiapas.
Este equipo analiza la eficacia de la fiscalización en el uso de los recursos por los partidos políticos en México.
Dicho proyecto es financiado por el PNUD, el IFE y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
 
--AVISO INOPORTUNO.
Gran oferta: se soba lomito, se curan chipotes y se dan terapias contra la tiricia.